Hoy Santurce amaneció sin energía eléctrica porque alguien le robó el cobre a una subestación de electricidad en el área. Los pillos venderán ese cobre por una miseria para sufragar su adicción, mientras que un área significante del área metro se quedará sin luz por el resto del día, si tienen suerte. Un acto de vandalismo sencillo costará una suma significante de dinero a los empresarios y negocios de la zona, especialmente a los pequeños negocios que no tienen plantas eléctricas. Imagínate una acción semejante en Palo Seco, una de las centrales de energía más grandes en la isla. ¿Me pregunto si ese cobre terminará en una de las construcciones que se llevan a cabo en el área o si los peristas lo comprarán para venderlo junto a las cámaras, computadoras y podadoras robadas en los programas mañaneros del País?
Por otro lado del país, el departamento de Justicia reconoció que la Policía manipula las estadísticas, para sorpresa de nadie, pero no puede hacer nada al respecto. Aparentemente entre todas las leyes que tenemos no existe una que tenga que ver con la falsificación de documentos públicos. No debe sorprender, ya que aquellos que escriben las leyes son los primeros en quebrarlas.
Mientras tanto, se nos exige pagar más impuestos cada día. Nuestras carreteras siguen igual de destruidas. Las agencias del gobierno son igual de ineficientes, mientras que la procuración de permisos y patentes no ocurre sin sobornos llamados «gestiones». El autobús tarda más de una hora en llegar, y el servicio más básico de transporte colectivo, el ferry, no sirve ni en Culebra, Vieques ni Cataño.
Es demasiado fácil ejercer un cargo público en Puerto Rico. No se requiere ningún tipo de destreza útil para la sociedad ni conocimiento alguno de cómo resolver problemas básicos. Si encierras nuestros legisladores para que tomen un examen de aptitud, la mitad insistirá en que es inconstitucional, mientras que la otra mitad utilizará su poder para ajustar el resultado a su favor.
¿Cuánto más aguantará el pueblo? Pensar en esa respuesta trae escalofríos cuando consideras que hemos soportado el coloniaje por siglos.